Y es que la artista catalana ha sido la encargada de componer parte de la banda sonora de la última película en la que participó Rosa María Sardá, antes de dejarnos.
Sin duda un logro a la alcance de muy pocos, que trae consigo una enorme responsabilidad y a su vez, un gran sentimiento de orgullo.
En última instancia, la intérprete nos animaba a ir al cine a ver Salir del Ropero, último baile en pantalla de la Sardá, icono y leyenda de nuestra cultura.
Una cultura que, para la cantante, sigue siendo un patrimonio innegociable: «Por favor, id al cine porque #LaCulturaEsSegura».
Desde luego, si Mónica canta y Rosa María actúa, el visionado solo puede traernos cosas positivas.