De esta manera el intérprete de Vida nos envía un abrazo de calma y tranquilidad. Una balada en la que Fonsi funde su voz en una dulce melodía de guitarra para hablarnos de las estaciones emocionales.
De cómo la tormenta o un duro invierno pueden llevarnos a florecer de la forma más pura, como en esta dura cuarentena. Todos y todas somos Girasoles que nunca dejan de girar, buscando los besos y los sueños que nos esperan en la siguiente etapa de nuestras vidas.
Una era en la que Luis Fonsi seguirá insuflándonos esperanza e ilusión con sus canciones.
Como la luna y el sol
Que hasta la noche siempre tienen que esperar
Aunque no estás hoy a mi lado, yo sé que tú vas a llegar
Los girasoles nunca dejan de girar
Como en la orilla del mar
El agua viene con caricias que se van
Yo sé muy bien que tú te fuiste, tú sabes bien que volverás
Los girasoles nunca dejan de girar
Te esperaré, te esperaré
Y cuando vuelvas con un beso, aquí estaré
Te esperaré, te esperaré
Como la lluvia y la flor
Una tormenta puede hacerte florecer
Y cuando ya se calma el viento, más linda tú te vas a ver
Aquí estaré, yo sé que tú vas a volver
Te esperaré, te esperaré
Y cuando vuelvas con un beso, aquí estaré
Te esperaré, te esperaré
Con la certeza que respiro, te amaré
Porque aunque sé que tú te fuiste, tú sabes bien que volverás
Los girasoles nunca dejan de girar
Hoy que te he visto volver
Mil girasoles te esperaron al llegar
No preguntaron dónde estabas, pero giraron sin pensar
Igual que yo, nunca dejaron de esperar
Los girasoles nunca dejan de girar
Ellos son mi Sol y mi mundo gira alrededor de ellos 💛🌻💛 #Girasoles pic.twitter.com/pJmEkcCtdw
— Luis Fonsi (@LuisFonsi) May 4, 2020