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Hubo un tiempo en el que Joaquín Sabina dirigía el timón de nuestra música y Leiva era un grumete que observaba al capitán desde cubierta. Con el paso de los años, el aprendiz se fue acercando al maestro, tanto a nivel artístico como a nivel personal.

Una relación que vivió su momento álgido hace casi 5 años, cuando Leiva se prestó a ayudar a Sabina con la composición de su 15to álbum de estudio, Lo Niego Todo, tras siete años de parón musical.

Desde entonces, los dos han compartido un estrecho vínculo, hermanados en ese romanticismo lírico, ese rock desgarrado y profundo que tanto les identifica y les corona como referentes de nuestra cultura.

Su nueva aventura, entre «ratitos de gloria»

Hoy, los dos artistas surcan los mares en busca de nuevas aventuras, como la que justo acaban de empezar.

La pasada madrugada, Leiva publicaba tres fotografías junto al jienense en lo que parecía una agradable tarde musical entre amigos, tocando y riendo.

Evidentemente, las redes estallaron en júbilo por la reunión de este icónico dúo, llenando y comentando cada publicación con altas dosis de amor y admiración hacia ambos cantautores.

 

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Es el verano más extraño y ladrón que recuerdo, aunque también tiene sus ratitos de gloria.

Una publicación compartida por Leiva (@leivaoficial_) el 5 de Ago de 2020 a las 2:13 PDT

«Andamos tramando algo bien bonito Joaquín y yo», declaraba Leiva junto a una de las instantáneas.

¿Será consciente de que es moralmente reprobable dejarnos esta intriga después de anunciar una colaboración de este calibre? Desde luego, él tan canalla como siempre.

 

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Andamos tramando algo bien bonito Joaquín y yo. xx

Una publicación compartida por Leiva (@leivaoficial_) el 5 de Ago de 2020 a las 2:16 PDT

Lo que de verdad nos alegra el corazón es ver tan contentos y felices a los dos intérpretes.

Sobre todo a Joaquín, quien disminuyó sus apariciones desde el accidente sufrido a principios de año en el Wizink Center.

Vuestra sonrisa es la nuestra. Veros hacer música, el mayor de los tesoros.