Desde recoger comida para llevar hasta asistir a un concierto muy concurrido.
El Coronavirus se transmite muy fácilmente de persona a persona. Los últimos estudios apuntan al contagio por aerosoles. Es cierto que la Covid-19 puede transmitirse más fácilmente que la gripe pero quizá no tanto como el sarampión.
La Texas Medical Association (TMA) ha publicado un interesante estudio en el que muestra, por niveles, los riesgos que entrañan algunas actividades de nuestro día a día. ¿Cuántas de las de mayor peligro has hecho recientemente?
A través de Twitter, esta Unidad Especial de Covid-19 ha valorado un total de 37 actividades y las ha ordenado por su nivel de exposición a un posible contagio. Puede que las situadas en lo más bajo no sorprendan; aunque algunas consideradas de alto riesgo sí lo hagan, y lo peor de todo, las hayas hecho de manera frecuente.
Ir a un bar, asistir a un servicio religioso con 500 o más fieles, ir a un estadio de deportes o asistir a un concierto de música muy concurrido. Estas cuatro actividades cuentan con la nota más alta de riesgo, lo que explica la actitud reacia de los organismos a, por ejemplo, permitir el regreso de los aficionados a un estadio de fútbol.
Lo cierto es que la infografía es muy clara: hay cinco niveles distribuidos en actividades de riesgo bajo hasta aquellas con un riesgo elevado pasando por otras con riesgo moderado y moderado alto.
Riesgo moderado en los centros escolares
Otro de los temas que más preocupa a los padres y madres es la «vuelta al cole». Se acerca septiembre y nadie es capaz de confirmar qué va a ocurrir con la enseñanza. Una decisión en el aire que se inclinará hacia el lado de las clases presenciales u online, dependiendo de la curva de contagios.
Lo cierto es que, según este gráfico, la vuelta de los más peques a sus respectivos centros escolares supone un riesgo moderado siempre que se respeten las medidas de seguridad. Para hacernos una idea, ir a la peluquería llega a ser más peligroso.
Mismo riesgo en una piscina pública que en una oficina
Este verano, muchos y muchas también habrán echado de menos el chapuzón diario en la piscina pública. Siendo uno de los lugares más concurridos en estos meses, se temía por el riesgo de rebrote. Sin embargo, tal y como señala la TMA, corren el mismo peligro de contagio los que acuden a este recinto, que los que hipotéticamente vuelven a una oficina o a su lugar de trabajo.
De la misma forma, cambia sustancialmente el hecho de comer en el interior de un restaurante a hacerlo en la terraza; hasta tres puntos de diferencia según el gráfico. Para las cenas con amigos o barbacoas, el análisis los sitúa dentro del riesgo moderado.
