El despecho es una de las peores sensaciones que existen. Para remediarlo, a esta mujer se le ocurrió una ideal genial con su ex. Nos lo cuenta Patricia Imaz.
La protagonista de esta historia encargó toneladas de cebollas y se las envió a su expareja. El «regalo» iba acompañado de una nota explicativa: «He llorado durante tres días, ahora te toca a ti».
Después de tirarse tanto tiempo sufriendo la pérdida del chico, y sobre todo al ver su felicidad en redes sociales con su nueva pareja, a esta pobre chica no le ha quedado otra que forzar las lágrimas de él a base de cebollas.
El muchacho no sabe, evidentemente, qué hacer con todo ese saco de alimentos… Y los vecinos ya se están quejando. «Ahora todo el edificio huele a cebolla», reconocía una de ellas en declaraciones recogidas de Diario Libre.
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