Hablamos primero de reacciones, como la del marido de Mireilla cuando la vio caer de culo por las escaleras. «¿Qué haces?», le preguntaba… Como si lo hubiera hecho a propósito. Lo peor de todo es que se casaban a la semana siguiente.
Misma pregunta le hizo el marido de Josefina cuando esta se tropezó en medio de la calle. Él, que iba hablando solo, avanzó un par de metros hasta girarse y ver la escena.
Para hilarante la historia de Raquel. Subida a una escalera, perdió el equilibrio y se agarró a lo primero que pudo: el póster de Brad Pitt de su hermana. Evidentemente, esto no evitó su caída. «Años después sigo diciendo que Brad Pitt no fue lo suficientemente caballero y me dejó caer», comenta entre risas.
Aunque ahora nos reímos, muchas de esas caídas provocaron situaciones dramáticas para más de uno o de una. Es el caso de Rosa con su luxación, de Fátima con sus dientes partidos en Primero de la ESO, o Aina, que paró un espectáculo de Drag Queen mientras su barbilla chorreaba sangre.