La Cesta de Navidad, una tradición -cada vez más escasa- a la que la Agencia Tributaria le puso ya el ojo encima el año pasado, especialmente si son por parte de la empresa al trabajador, también tributa al fisco. .Tanto la empresa como el beneficiario del regalo deben declararlo ante Hacienda.
Si no teníamos suficiente con perder dinero de los premios de la Lotería de Navidad, los técnicos de vuelven a sembrar el terror en nuestras finanzas advirtiendo de que las cestas navideñas tributarán como un incremento del patrimonio en la escala del IRPF, a no ser que éstas se consideren como rentas del trabajo en especie.
Un incremento que deberemos incluir con el resto de rendimientos percibidos cuando hagamos la declaración, siempre y cuando éstas superen los 300€ en su conjunto. En tal caso nos retendrán el 19%. ¡Caray con las cestitas!
Si bien es cierto que la práctica de las cestas cada vez se ve menos en las empresas españolas, no deja de ser agradable cuando se recibe y se disfruta. Desgraciadamente, parece ser que recibir un cava y un jamón nos convierte en millonarios. Desde luego, qué suerte tenemos.
Una suerte que según Hacienda es mejor compartir, como en el caso de los décimos de lotería. En este apartado el sindicato informa de que si se comparte el pago del décimo, y éste sale ganador en uno de los tres primeros premios, Loterías y Apuestas del Estado atribuiría la parte proporcional de dichos premios a cada persona, sin retenciones.
Sin duda una oferta muy tentadora para nuestra economía, teniendo en cuenta la cantidad de facturas e impuestos que se nos avecinan en 2020.
Además, si ganamos un premio y decidimos ayudar con un «pellizco» a algún amigo o familiar, éste tendría que declararlo a través de Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Ya sabéis, ¡compartir es vivir!
Cuidado con revender décimos
Ésta es la otra advertencia de la que Hacienda nos informa.
Porque existen numerosos casos de personas que compran décimos premiados con el fin de lavar dinero negro, y aunque esto sea algo difícil de investigar debido al impuesto de Loterías, podríamos acabar involucrados en un delito de blanqueo de capitales si somos la parte vendedora.
Y bien, ¿ qué os ha parecido nuestra particular cesta de información? Desde Cadena Dial os la regalamos con la mejor de nuestras intenciones… y sin retenciones.
