La clave del éxito no parece estar en la manera de nuestro compañero de vender su tema. Desesperando a varios oyentes, muy pocos van a querer perder un poco de su tiempo para escucharlo por teléfono: «Que no soy Paco y que hemos terminado», le decía el primer atrevido visiblemente molesto.
La paciencia no prima ni en los oyentes ni en Isidro Montalvo, quien buscaba ansiadamente poner su tema y recibir una valoración. Y no sé si hubiese sido mejor recibir una crítica feroz antes que el tremendo vacío en cuanto le dio al «play«. ¡La atrevida colgó a los pocos segundos!