Isidro Montalvo, preocupado por las barbacoas que organiza esta atrevida

Rodrigo Díaz

Desde el ambulatorio andan preocupados por los análisis de orina de esta pobre mujer: Todo está perfecto salvo el nivel de grasas, totalmente disparado por las barbacoas que organizan esta atrevida y las ya famosas Goyita y Angelines.

 

 

 

«Hay que intentar bajar esa costumbre de los torreznos«, comenzaba Isidro Montalvo al hablar con la primera atrevida. A ella se le iba a gastar rápidamente la paciencia, y sin dejarle terminar, decide colgar, no sin antes mandarle bien lejos.

Con la segunda atrevida se repite la historia: Harta de repetirle que se había equivocado de teléfono y que no tiene ninguna cuñada, va a acabar cabreándose con el supuesto Doctor Jaime Moreno: «Pero qué pesado, por dios».

Finalmente, tocaba un tercer intento con una oyente a la que se le conoce por unas barbacoas muy generosas. «Me han dicho que no paráis, ¡cada fin de semana una!», acusaba un Isidro Montalvo que, para colmo, había recibido la noticia de que no pararon de comer panceta.