Y mira que nuestro compañero estaba molesto por no haberles dado las medidas correctas… Pero pronto se va a tranquilizar viendo lo alterados que están al otro lado del teléfono.
Primero, con un oyente que le va a tener en espera durante varios segundos mientras comenta la situación con un compañero. Más tarde, con una atrevida igual de harta de que la tomen el pelo y de asegurarle que ella no es la supuesta Laura.