Antes de explicar qué ocurrió, nuestro compañero recurrió a un azulejo que le acercó el atrevido David Martín. Dice así: «Amigo que no vale y navaja que no corta… Si se pierde poco importa».
Y es que, para Isidro, Luis Larrodera se ha convertido en lo primero tras el tremendo plantón que nos llevamos el día de su cumpleaños. «Nos tuvo esperando tres cuartos de hora en la puerta del restaurante«, explicaba.