La energía de Chayanne, su carácter y personalidad se ven reproducidos en sus hijos, quienes comparten con su padre muchas particularidades. Entre ellas, que causan sensación en los demás.
Lorenzo e Isadora Figueroa superan con creces los 300 mil seguidores en sus respectivas cuentas de Instagram. Ambos se han convertido en todo un fenómeno de las redes sociales, al margen de por ser hijos del artista, por demostrar tanta naturalidad y algún que otro talento.
Lorenzo Figueroa es el primogénito del cantante. A sus 23 años, tiene claras las prioridades de su vida: su familia. Las instantáneas con su padre o su hermana llenan su cuenta, así como las palabras de cariño que les dedica con frecuencia.
La herencia de Chayanne en él se ve más en el físico. Desde una edad muy temprana Lorenzo supo que no seguiría los pasos de su padre en el mundo de la música, pero encontró otra afición que comparte con él y con la que se ha convertido en una fotocopia de su padre, solo que en una versión más joven.
Se trata del deporte. Al hijo de Chayanne le gusta tanto como a su padre cuidar su físico y presumir de él en sus redes sociales. En alguna ocasión han compartido instantáneas juntos que nos permiten ver su gran parecido. El dicho «de tal palo, tal astilla», nunca tuvo más sentido.
Por su parte, Isadora ha heredado de su padre el talento de la música. A diferencia de su hermano, esta sí conecta con Chayanne en este terreno y a veces sorprende a sus seguidores con el micro en las manos.
Canta, compone y toca el piano que da gusto escucharla. Durante el confinamiento nos regaló una versión muy especial de Somos el mundo que hizo con la intención de llenarnos de fuerza. Es en eso, como en otros muchos detalles, por lo que sabemos que no solo ha heredado el talento, sino también la humildad y la solidaridad de su progenitor.