Efecto Pasillo

Efecto Pasillo y el proyecto Bosque Pocoyó: en el fondo son como niños

Nuria Serena

Los chicos de Efecto Pasillo nos enseñan su faceta más comprometida y sostenible apoyando el proyecto de reforestación “Bosque Pocoyó”. Así que no te preocupes: seguiremos disfrutando de canciones como No te enamores o Carita de Buena.

Localizado en la isla de Gran Canaria, se trata del primer espacio natural inspirado en la serie de animación que triunfa en todo el mundo y su objetivo es crear un entorno de sensibilización medioambiental dirigido a toda la sociedad y, en especial, a los niños desde edades tempranas.

Esta iniciativa surgió como respuesta a los incendios del verano de 2019 que arrasaron 10.000 hectáreas de la isla.

Los integrantes del grupo han participado hoy en la inauguración del proyecto, junto al presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales. Como padrinos de excepción han tenido, además, la oportunidad de plantar ellos mismos un árbol que crecerá con su nombre.

Ahí tenéis a Iván, Javi, Nau y Arturo plantando su árbol

¡Disfruta la fotogalería!

 

“Para nosotros, contribuir con este gesto a la recuperación y mejora de nuestra tierra es un verdadero regalo. Nos consideramos bastante comprometidos con el respeto por el medio ambiente; desde los pequeños detalles en nuestra vida diaria hasta nuestra presencia en proyectos más ambiciosos, creemos que es importantísimo cuidar nuestros barrios, nuestras ciudades y, sobre todo, nuestros campos. Gracias, de corazón, a las personas que hacen esto posible y visible”, ha asegurado Ivan Torres.

El proyecto

“Bosque Pocoyó” es un proyecto sin ánimo de lucro impulsado por las compañías Zinkia y KOYI, productoras de la última temporada de la serie del mismo nombre. La idea surgió tras los incendios del verano de 2019 que arrasaron 10.000 hectáreas de la isla y ambas empresas han sufragado los costes necesarios para dar vida a los primeros 1.000 árboles.

 

La plantación de estos primeros árboles se ha llevado a cabo en el área recreativa de San José del Álamo, cercana a la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Esta área forma parte del Paisaje Protegido de Pino Santo, que se distingue por albergar bosques termófilos. Este tipo de bosque ha sufrido históricamente una importante deforestación y solo se conserva un 2,6% de las más de 40.000 hectáreas de la isla de Gran Canaria que se estima que estarían cubiertas por este ecosistema.

 

Cualquier persona u organización que quiera participar en el proyecto y apadrinar un árbol puede hacerlo a través de www.pocoyo.com/bosque. Aquí se expide un certificado que identifica el ejemplar que corresponde a cada colaboración y que garantiza la plantación, así como su cuidado mediante los tres primeros riegos para asegurar su viabilidad.