La sensación que se tiene cuando te rompen el corazón es indescriptible. Crees que no hay nada que duela más en el mundo. A partir de ese momento piensas que has nacido para estar solo o sola y que nadie te va a querer de verdad.
A Diego le han roto el corazón, y no solo una vez, sino tres. Tiene 52 años y las tres relaciones que ha tenido a lo largo de su vida le han acabado destrozando el corazón. Las tres mujeres le fueron infiel. Él no sabe el motivo porque lo da todo por la persona que esté a su lado. Ahora no se fía de nadie, no habla con ninguna mujer por miedo a que le vuelvan a ser infiel. Diego no puede soportar que hayan jugado siempre con sus sentimientos y se resigna a no encontrar un amor real.