Sin embargo, otra investigación publicada por la revista Celly apunta a que algunas personas podrían no haber pasado la enfermedad pero ser inmunes a la misma.
El estudio lo ha llevado acabo el Instituto de Inmunología de La Jolla, en California (EE UU). Lo mejor es que ha puesto ya un porcentaje al colectivo de asintomáticos: un 26%. Es decir, cuatro de cada 10 personas podrían ser inmunes al Coronavirus.
Tras semanas de análisis, los científicos han llegado a la conclusión de que hay personas que han adquirido cierto nivel de inmunidad frente al coronavirus porque anteriormente han estado infectadas por otros virus, lo que les ha ayudado a desarrollar ciertas defensas.
Las defensas se ‘activan’ al reconocer al ‘enemigo’, aunque sólo una parte pequeña, los Linfocitos T, suficientes para poder frenarlo.
Los linfocitos T tienen dos vertientes defensivas contra los agentes malignos: las células T auxiliares que estimulan a los actores inmunes para que estén alerta ante virus, y las células T asesinas que destruyen las células infectadas. El estudio sostiene que los linfocitos T son los que ayudan en la defensa de los pacientes con pocos síntomas o asintomáticos.