Se desarrolla en un pueblo aparentemente tranquilo, donde aparece una de las 30 monedas con las que hace más de 2.000 años Judas traicionó a Jesucristo y desde ese momento sus vidas nunca volverán a ser lo mismo…
‘El mal tiene un precio’, dicen, pero para los protagonistas con los que ha hablado Patricia Imaz, tiene un punto de placer que han disfrutado muchísimo. Por ejemplo, cuando tras horas de rodaje seguían llenos de sangre y les gustaba tanto que se la dejaban hasta llegar a casa para que la vieran sus familiares
Y helados se van a quedar todos los que vean la terrorífica serie que da tanto miedo que hemos necesitado consejos para verla ¿solos, bajo una manta, acompañados, a la luz del día?
Si quieres saber qué opinan ellos y cuántos rituales han hecho en su vida, no pierdas detalle de su entrevista #enCasaTalCual: