Pero ¿sabes que hay enemigos de nuestra dieta que parecen inofensivos, que se camuflan bajo apariencias inocentes y que, sin embargo, trabajan incansablemente alimentando nuestro sobrepeso?
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En www.cadenadial.com vamos a descubrirte cuales son algunos de los aliados más desconocidos de la obesidad.
1. Las comidas en familia: Donde la mesa es una verbena de aperitivos, la consecución de platos parece no tener fin y las sobremesas se alargan hasta límites insospechados con café copa y puro ¡que a veces hasta se puede comer!
2. Convivir con un familiar o un amigo con sobrepeso tampoco ayuda demasiado. Al contrario, el efecto contagio de la dieta es un hecho constatable aunque a decir verdad esta máxima también funciona a la inversa: la delgadez también se transmite, y si sus amigos están flacos (IMC de 20), usted tiene un 40% más de posibilidades de reducir su peso.
3. El año en en el que naces también determina tu Indice de masa corporal. Hay un punto de inflexión clave: antes de 1942 y después cuando se produce el desarrollo tecnológico posterior a la Segunda Guerra Mundial.
4. No olvides este nombre, Christensenellaceae. Son unas bacterias intestinales que nos protegen del aumento de peso. Aunque este microorganismo se hereda, su hallazgo abre la puerta a diseñar tratamientos probióticos personalizados contra la obesidad.
5. La música clásica abre el apetito. Un estudio de las universidades de Leicester y Surrey Roehampton concluye que se consumen más alimentos y café en los locales cuando hay música clásica de fondo que cuando suena otro tipo de melodía.
6. La alteración del ritmo circadiano. Las personas que trabajan de noche tienen más tendencia a engordar porque rompen el ciclo fisiológico y esto provoca una disminución del gasto energético diario total
7. Dormir poco también ayuda al sobrepeso, además de provocar cambios de humor. Es muy sencillo… al no dormir comemos más para ayudar a nuestro cuerpo a permanecer despierto
8. Los contaminantes ambientales y pesticidas se acumulan en el organismo, concretamente en el tejido graso de las personas, favoreciendo el desarrollo de obesidad y el aumento del colesterol en la sangre.
9. La televisión es ¡el enemigo público número 1! Dormirse con la televisión encendida ayuda s subir de peso. La luz artificial que emite la televisión, el ordenador o una lámpara encendida- reduce los niveles endógenos de melatonina, una hormona que se libera durante la noche para regular los ritmos circadianos y que posee un potente efecto antioxidante y antiinflamatorio. Estas propiedades protegen de alteraciones metabólicas que provocan obesidad y diabetes.
10. La depresión y la ansiedad. Hay quién adelgaza con las preocupaciones y quién aplaca su estrés con la comida, sobre todo con alimentos ricos en azúcares y grasas.