¿Cómo evitar que tu pareja pida un vibrador para Reyes?
Para empezar, es necesario recordar que esto no es un tema de competición, sino de educación y comunicación.
El sistema siempre ha puesto el placer de la mujer en segundo plano, a nivel cultural y sociológico. Todo esto ha provocado que tanto hombres como mujeres hayan crecido con una concepción errónea y poco empática del sexo, lo que ha derivado en el aumento de la satisfacción manual e individual, y en última instancia, de éxitos como el Satisfyer.
Este juguete erótico que mezcla vibración y succión en la zona del clítoris ha supuesto una auténtica revolución entre las mujeres, que, hartas de esperar una mejor respuesta de los hombres en la cama, han decidido apostar por la magia e inmediatez de este invento.
Pero no todo está perdido amigos. Aquí te vamos a dar tres claves para que tu pareja recupere la fe en ti de cara a vuestra vida sexual.
Compaginar deseo y estrés
Una de las excusas más utilizadas en la actualidad a la hora de no tener sexo es el estrés. Rutinas laborales ajetreadas y compromisos sociales son un caldo de cultivo peligroso que puede desactivar el apetito sexual.
Ahora pensad en lo siguiente. Durante la Segunda Guerra Mundial la tasa de natalidad se disparó en todo el mundo, creando una tendencia que más tarde derivó en el famoso «baby boom».
¿De verdad el estrés es una excusa? No, puedes con todo.
Un sexo manual y sensual, no mecánico
El sexo se debería contemplar como una receta de cocina, lenta, sabrosa y efectiva, y no como unas palomitas de microondas. Ya sabes, mucho ruido y pocas nueces.
Un gran problema en la concepción del sexo en nuestra sociedad es querer anteponer la velocidad a la sensualidad.
Y no, hay que tomárselo con más calma. Explorar juntos cada zona, jugar, tocar. Solo así se puede conseguir una experiencia más plena y menos rutinaria o repetitiva.
Hablar e informarse más, competir menos
La cultura sexual que tenemos es baja, pero no es nuestra culpa del todo. Pocas charlas con nuestros padres, pocas charlas en el colegio, y los conceptos presentes en las mismas, muchas veces erróneos y anticuados.
Si a esto le sumamos la pornografía, que nos presenta un sexo artificial y nada empático, todo cobra sentido en esta problemática de insatisfacción.
Así que escucha a tu pareja, pregúntale lo que sí y lo que no. El sexo comprensivo y comunicativo es el que da los mejores resultados. Lo demás, es ciencia ficción, una imagen distorsionada y anti humana del acto sexual.
Un acto sexual que mejorará con tu pareja si pones estos pequeños hábitos en práctica, para así evitar que los Satisfyer y demás compañeros de plástico no sean tanto un rival, sino un aliado y una oportunidad para ser mejores amantes, y mejores personas.
¡Por un 2020 de sexualidad plena!
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