En Cadena Dial no hay armarios porque nuestro orgullo no cabe en ellos ¡#FelizOrgullo!

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Una vez más, Cadena Dial se suma a la lucha por la Diversidad, la Igualdad y la Inclusión. Porque en nuestro sello #SéDial hay hueco para todas las banderas que luchan por los derechos básicos de las personas, y uno fundamental es el derecho a amar libremente.

Lo que sí que no hay es espacio para armarios, porque nuestro orgullo no cabe en ninguno de ellos. 

En Cadena Dial queremos acabar con la cultura del armario. No queremos esconder quiénes somos ni a quién amamos, queremos hacerlo libremente y que ello deje de ser un tabú. Porque el amor, como la música, no entiende de colores, idiomas o géneros. 

Hoy más que nunca estamos orgullosos de que todas las personas que forman la familia Dial alcen la voz para decirlo muy claro: Nuestro orgullo no cabe en ningún armario. 

La música, nuestro mayor Orgullo

Las canciones de nuestros artistas llevan allanando el camino de muchas personas desde hace muchos años con su aporte a la tolerancia y enseñándonos que hay muchas formas de amar y ninguna de ellas vale más que otra. 

Por eso, acogiéndonos a nuestra materia prima, la música, llevamos días estrenando sonrisa con orgullo de la mano de temas que nos lo cantaron claramente, como Abre tu mente, de Merche, A quién le importa, de Alaska y Dinarama, o el clásico Mujer contra mujer, de Mecano.

Nuestro mayor orgullo es que los mensajes de las canciones sean tan libres como lo es la propia música, y que lleguen a corazones verdaderos que aceptan y respetan al prójimo. La música tiene el poder de vaciar armarios.

¡#FelizOrgullo!

Celebra con Cadena Dial el Día del Orgullo LGTBIQ+. Queremos demostrar nuestro compromiso y el de nuestros oyentes y lectores por construir una sociedad más libre, sin cadenas y basada en el respeto. Hoy recordamos los Disturbios de Stonewall y lo que nos ha costado llegar hasta aquí. Pero este no es el fin del camino. Juntos debemos seguir luchando para proteger los derechos de todas las personas.

Ojalá llegue el día en el que no haya que reivindicar, solo celebrar lo conseguido.