El artista madrileño pisaba estas tierras acompañado de su chica, Rachel Valdés, y su hija Manuela, para presentar El verano que vivimos, la película a la que ha prestado su voz con el tema principal, del mismo nombre.
Pero no todo es trabajo. Alejandro Sanz ha aprovechado su visita al Norte y la buena compañía para disfrutar de una velada en el restaurante del doce veces Estrella Michelín, Martín Berasategui.
Tras la cena, artista y chef disfrutaron de su compañía y compartieron una instantánea juntos en sus respectivas redes sociales.
Lo curioso de la imagen fue que Alejandro Sanz vio en ella una presencia especial. Su propio reflejo en el espejo le recordó a una persona muy importante en su vida que se marchó hace justo dos años: su tío Paco, quien estuvo ligado en vida al mundo de la restauración.
«El tío Paco quiso estar conmigo ayer«, expresaba junto a la imagen en la que centraba la atención en su reflejo, una copia del perfil de su querido tío. Este mes, además, se han cumplido dos años de su fallecimiento, lo que seguramente ha pillado al artista con el recuerdo muy latente.