Una boda que fue llevaba a cabo de la manera más íntima posible debido a la situación que vivimos actualmente con el coronavirus, pero en la que no faltó la tradición familiar y, por supuesto, la música.
Alejandro Fernández no faltó a la cita, como no podía ser de otra manera, pues acompañaba a su hija hasta el altar. Era el día de que su niña brillara, pero él tampoco se quedó atrás, vistiendo un típico traje de charro al que por supuesto no le faltó el moño blanco al cuello. El mexicano volvió a demostrar que no solo es un caballero por fuera, sino también por dentro.
Camila es una de las gemelas de Alejandro Fernández, fruto de su matrimonio con América Guinart. Esta decidió pasar por el altar a sus 22 años tras nueve meses de relación con el que ya es su marido. Una decisión que tomó segura al sentir que vive una relación preciosa con el hombre de su vida.
A Francisco Barbas no le costó mucho adentrarse en la familia de Camila. Ambos ya tenían varios amigos en común y aficiones similares. Y, a decir verdad, conquistó tanto a la hija como al padre, Alejandro Fernández, casi desde el primer momento. Algo que imaginamos debía ser crucial para Camila, dado la importancia que esta da a la familia.
Las mascarillas entre los invitados no quitaron glamour a una cita tan especial. La música ha impregnado a cada generación Fernández, comenzando por el padre del intérprete de Caballero, Vicente Fernández, siguiendo por Alejandro Fernández y continuando en sus hijos. Tanto Álex como Camila han seguido sus pasos en la música, teniendo muy presente sus raíces mexicanas a la hora de embarcarse en esta aventura.
Un hecho que se vio reflejado en este día tan importante para la familia, pues la boda se llevó a cabo al más puro estilo charro, algo que se podía ver ¡hasta en los trajes de los novios!
Siendo tan solo una adolescente la joven Camila cantó junto a su padre en dúo, una experiencia tras la que decidió que quería dedicarse a la música y seguir los pasos de su progenitor.
Al poco tiempo publicó su primer trabajo discográfico, Mío, además de haber realizado colaboraciones con Disney, como esta que nos regaló junto a Alejandro Fernández: El ciclo sin fin, de El rey león.