En esta encuesta realizada a 12.400 conductores, el 58% admitió haber insultado a otras personas al volante; mientras que el 66% reconocía tocar el claxon de manera intempestiva.
Dejamos claro que «la culpa siempre de los demás», porque hasta el 97% se ha descrito conduciendo con un adjetivo positivo. Sin embargo, el 83% de los encuestados había superado en más de una ocasión los límites de velocidad. Y lo más alarmante: El 20% reconoce que se transforma en otra persona cuando va al volante.