Hoy te daremos 5 consejos para realizar esta tarea sin ningún tipo de riesgo. ¡No te la juegues!
Cuando entres en tu tienda virtual, asegúrate de que aparece el símbolo del candado cerrado en la parte superior del navegador. Esto quiere decir que tus datos no son públicos en esa web, estás protegido.
Actualmente casi todos los portales poseen un apartado abajo con opiniones de los clientes. Búscalas y asegúrate de que sean no solo positivas, sino también creíbles.
Si ves que los precios de los productos son notablemente más baratos de lo habitual, puede ser que no estén añadidos los porcentajes legales y te lo cuelen más tarde sin que te enteres. Confirma que el IVA está presente en tus compras.
Una buena señal para saber que estamos realizando una compra segura es que una página ofrezca varios canales de pago oficiales. Además de esto, el pago debe tener mecanismo de doble autenticación, que normalmente se hace a través de SMS.
En última instancia, si aún no estás del todo convencido sobre la seguridad de la web, consulta estos aspectos: cumplimiento de la normativa vigente de devoluciones, condiciones legales e información de contacto, en caso de que surgiera alguna dificultad.