Si supiésemos, de verdad, como deberíamos sentarnos podríamos tener en nuestras manos la solución a muchos problemas. Algunos de ellos son los cinco que hoy os contamos… ¡sigue leyendo! Seguro que muchos de los problemas que te contamos no los asociarías nunca con una mala postura.
1. El egoísmo puede estar relacionado con una mala postura: según varios estudios, sentarse de la manera adecuada y saber mantener una buena postura reduce los niveles de egocentrismo y nos ayuda, además a encontrarnos a gusto y en armonía con el resto de la gente, algo que te permitirá tener más empatía con los demás.
2. Si tu vida sexual no va bien… ¡cambia tu postura!: tener una postura encorvada se relaciona con falta de seguridad en uno mismo, baja energía y autoestima algo que según varios estudios nos hace parecer menos atractivos. Por el contrario si mantienes una posición recta con los hombros hacia atrás y el cuello alineado con el resto de tu cuerpo, la actitud que transmites es totalmente diferente y adoptarás la postura de poder. Siempre atraen y nos gustan más en la cama las personas que transmiten seguridad.
3. Una mala postura provoca dolores de espalda: esto es bastante obvio, aunque nosotros no le hagamos mucho caso, los dolores de espalda son uno de los principales motivos por los que la gente acude al médico. Además, está comprobado que no sabemos tener una postura adecuada durante un largo tiempo.
5. Una mala postura te hace parecer más mayor: esto se debe a que cuando pasas mucho tiempo sentado en una mala postura acabas desarrollando un bulto o en el cuello o en la espalda e incluso puede llevar a la caída del pecho en las mujeres, reacciones físicas que acabarán provocando que parezcas mucho más mayor de lo que realmente eres.
Teniendo en cuenta todos estos problemas, piensa en mantener una postura adecuada en todo momento ya que acabarás favoreciendo a tu salud e incluso conseguirás sentirte mucho mejor.
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