¿Recuerdas cómo era tu vida antes de Google? Nadie resolvía tus dudas existenciales como qué diferencia hay entre el calamar, el pulpo y la sepia. El sabelotodo, en este caso, no era un buscador, sino Carlitos, ese compañero repelente del colegio que no respondía a tus vacilaciones con un «quizá quisiste decir», sino llamándote «zoquete»
Hace dos décadas podías hacerte el chulito con un dato sorprendente; ninguno de tus amigos comprobaría si estabas en lo cierto. Mientras, las discusiones del bar no se zanjaban: cada uno se volvía a casa pensando que tenía razón. Y es que la irrupción del buscador cambió nuestras vidas y sigue haciéndolo. Su evolución no tiene techo y la prueba es el actual proyecto en el que trabaja su grupo de científicos. Puedes buscarlo en Google para saber más… o seguir leyendo.
Los ojos, el espejo del alma… ¡y de tu salud!
Tu mirada desvela que estás enamorado o que te sientes triste, pero ¿sabías que tus pupilas podrían reflejar si vas a sufrir enfermedades cardiovasculares? Suena a película de ciencia ficción, ¿verdad? Pues es tan real como la vida misma. La compañía se adentra en el área de la medicina gracias a la Inteligencia Artificial, ese concepto que hasta hace bien poco te sonaba a chino. Y lo hace creando un algoritmo que con tan solo un movimiento es capaz de predecir si vas a sufrir un infarto.
¿Pero cómo es posible?
Al parecer, se escanea el ojo del paciente e inmediatamente se comparan los resultados con los de más de 300 000 individuos. Son personas que forman parte de la base de datos y que ayudaron a formular el patrón. Con ese simple gesto, este mecanismo es capaz de conocer tu edad (mala suerte, si siempre tratas de ocultarla). Pero también sabrá que estás fumando, con lo que tu pareja se enterará. Lo sentimos, ¡no todo iban a ser buenas noticias!
Más rápido e igual de preciso
Además de generar una discusión de novios, este algoritmo conocerá tu presión sanguínea en este simple vistazo. Estos datos le ayudarán a determinar de una manera más rápida que con los métodos tradicionales si vas a padecer una dolencia cardíaca en el próximo lustro. Y no solo eso, sino que su precisión es similar a la de un análisis de sangre. Ya, todavía estás alucinando, ¡normal!
¿Por qué el ojo?
Los expertos aseguran que su parte trasera está formada por un sinfín de vasos sanguíneos. Estos tienen más información sobre la salud de tu cuerpo que los periodistas del corazón sobre los famosos. La máquina les daría voz para predecir tus males. Y no una estimación. Y es que los científicos manifiestan que el porcentaje de acierto de esta técnica nada invasiva ronda el 70 por ciento. No está nada mal, ¿no crees?
¿Cuándo lo veremos en los hospitales?
De todas formas, aún falta un tiempo para que veamos este sistema en los hospitales y en los centros médicos. Deben realizarse más pruebas, pues el mecanismo aún ha de perfeccionarse.
¿Cómo se te queda el cuerpo? ¿Estás de acuerdo con que sean algoritmos informáticos en lugar de médicos los que te ofrezcan un pronóstico? En realidad, este proyecto no pretende sustituir a los doctores, sino proporcionales más herramientas para facilitar su trabajo. Con estos últimos avances de Google podremos prevenir un accidente cerebrovascular o un infarto de miocardio. El buscador no solo nos facilita la vida, ¡sino que nos la puede alargar!
