Se habla de que a partir de ciertas edades bajar esos kilitos de más es prácticamente imposible, sobre todo porque nuestro cuerpo tiende a estancarse y en el caso de las mujeres, la menopausia no nos favorece, ya que los cambios hormonales vienen casi siempre cargados de un aumento de peso que suele ser visible en el abdomen, donde se almacenan reservas de estronas (estrógeno débil).
La grasa que se acumula en esta zona es necesaria para la metabolización de esta hormona y protege a la mujer de los cambios que se producen en el cuerpo durante esta etapa. Si la presencia de grasa abdominal en esta zona es considerable es importante estar pendiente pues puede perjudicar a la salud, pero si por el contrario es una pequeña cantidad, no te asustes, con la llegada de la menopausia que esto suceda es normal y prácticamente inevitable.
A partir de los 50 es importante tener en mente algunos de estos consejos, además sigue una dieta saludable y realiza ejercicio.
No te olvides del desayuno: es la primera comida del día, por lo tanto, la más importante. Nos aportará la energía necesaria para empezar el día con fuerza. Ten en cuenta que a esta hora tu cuerpo necesita alimentos como lácteos, cereales, fruta… ¡dale lo que te pide!
Más fruta: la fruta es una de nuestras aliadas a la hora de llevar una vida saludable. Toma frutas con alto contenido en potasio como los cítricos, el melón o el plátano entre otros que nos ayudan a regular la retención de líquidos. Si prefieres otro tipo de fruta, ten siempre en cuenta la manzana, pues es una de las frutas más sanas que podemos consumir. Al poseer un alto contenido de polifenoles disminuye el riesgo de enfermedades crónicas y controla los trastornos metabólicos que lo generan. Los frutos rojos también son una buena opción. Es preferible que la fruta sea consumida como pieza y no en forma de batidos o zumos, ya que de esta forma suelen perder varias de sus propiedades y no tendrán el mismo beneficio.
No te pases con las legumbres: se moderada y combínalas con otros alimentos como las algas o las ensaladas, una ensalada de garbanzos nunca es mala opción te ayudará a saciarte sin llenarte demasiado, lo que favorecerá a nuestros objetivos.
Adiós grasas: evita las grasas saturadas o las grasas animales… opta por grasas vegetales o por carnes blancas, marisco, pescado… te ayudarán a sentirte mejor y por supuesto a conseguir la figura que deseas.
