El gran fracaso de la bufanda que transforma en invisibles a tus ídolos

Laura Mangas

Hace ahora tres años, se hacia viral en las rrss el descubrimiento de un tejido que podía hacer que la persona que lo portaba fuera inmune a las fotografías. Con el avance de la tecnología el inventó se fundió con la moda para dar lugar a una auténtica maravilla.

Una bufanda, con un estampado de formas geométricas, hecha del material de los chalecos reflectantes. Contaba con miles de diminutos cristalitos que hacían que la luz del flash rebotara cuando se tomara una fotografía o se grabara un vídeo. De esta forma no se vería el rostro de la persona.

Gracias a la empresa ISHU, de la mano del creador de 31 años, Saif Siddiqui, famosos como Cameron Díaz, Paris Hilton o Nick Jonas podrían gozar de algo más de privacidad luciendo esta divertida prenda que se podía encontrar en la web oficial desde 234 euros.

A este joven empresario le llegó la idea hace unos años cuando estaba con unos amigos en Amsterdam. Al sacar una foto con cientos de bicicletas detrás, los reflectores de las mismas crearon una alteración y los rostros de las personas fotografiadas no se veían.

A los 6 años se creaba ISHU, que se dio a conocer con su primera prenda, la bufanda, en la semana de la moda de Toronto. Este innovador tejido que «devuelvía la privacidad a los famosos«, fue transformado en corbatas, ropa deportiva, fundas de móviles…

@parishilton x @ishu_scarves 🚫📷 ! Left pic: Without flash Right pic: With flash Black out all pictures taken with flash. #WhatsTheISHU?

Una foto publicada por Saif Siddiqui ISHU (@saif_sdq) el

 

Demasiadas expectativas para un producto que no termina de convencer

La razón es evidente: La bufanda solo funciona en situaciones de poca luz en donde los paparazzi disparen el flash, así que la fotografías durante el día no presentan ningún reto en lo absoluto.

Es más, para los expertos paparazzi estos productos han estado en el mercado durante años, y su consumo no ha despegado. La mayoría de las celebridades jamás soñarían con perderse un momento flash.