La señora tenía diversas deudas con el móvil de su padre. Compró un teléfono de 1.000 euros que quizás no podía permirtírselo, ya que ahora no está cubriendo sus gastos. Montalvo le reclamó el dinero ya que tendría que haberse pillado uno por 50 euros, no el más caro. La atrevida se ofendió y le colgó tras insultarle.
La bromita no podía ir a más ya que la señora estaba de los nervios a las 7 de la mañana y no lo merecía.