Un atrevido ha realizado un pedido en un restaurante chino, pero parece ser que el repartidor se ha equivocado de domicilio.
El señor al que llamó no había hecho ningún pedido pero se ha portado bastante bien con el empleado chino, quién no entendía muy bien español. Al final le ha recitado un poema de su país por haber sido tan amable con él.
Se ha creado un sentimiento de amistad muy bonito en pocos minutos.
¡Escucha aquí la bromita!
¿Quieres escuchar otra? Pincha aquí.
© Sociedad Española de Radio Difusión, S.L.U.
© Sociedad Española de Radiodifusión realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin de conformidad con el artículo 67.3 del Real Decreto-ley 24/2021, de 2 de noviembre.