Será porque la temperatura no es la correcta o porque tu colchón no es el más adecuado, pero llevas ya varios días sin pegar ojo. Te levantas peor de lo que te acuestas, no eres capaz de hacer nada y te preguntas cómo puedes solucionarlo. No te atiborres de somníferos todavía, quizá la solución sea más sencilla de lo que piensas.
Tampoco es que tengas que llegar al extremo de contratar a alguien para dormir haciendo la cucharita, pero ten en cuenta los siguientes consejos para dormir mucho mejor. Recuerda que el insomnio no es una tontería. Puede tener importantes consecuencias para la salud.
Pero, cuando se trata de dormir, no hay que hacerlo de cualquier forma, mejor hacerlo sobre el lado izquierdo. Verás todas las ventajas que tiene:
– Estimula el funcionamiento del sistema linfático. El organismo aprovecha el sueño para equilibrar los niveles de glucosa, proteínas y metabolitos. El sistema linfático se encarga de poner a punto el cuerpo para el día siguiente. Ayudarle a lograr este objetivo es más sencillo durmiendo hacia la dirección antedicha.
– Ajusta el aparato digestivo. El estómago y el páncreas recibirán una presión, la de tu peso, más que adecuada para que funcionen correctamente. Se estimula la creación de jugos gástricos y permite limpiar el cuerpo de impurezas con mayor celeridad.
– Para mejorar tu salud cardiovascular. El corazón también se encuentra en ese lado del cuerpo. Al tumbarte hacia la izquierda conseguirás que haga menos esfuerzo al bombear la sangre.
– Mejora la posición de la espalda. La columna no soporta tanto peso y es más fácil relajar la musculatura.
– Es aconsejable para las embarazadas. Como consecuencia de lo ya comentado, las embarazadas se sentirán mucho mejor y el bebé recibirá un mayor número de nutrientes durante el descanso de la madre.
– Protege el bazo. La propia gravedad permitirá que este órgano reciba lo que ha de filtrar de manera natural y sin esfuerzos.
– La siesta, también hacia la izquierda. La digestión será mucho más ligera y te permitirá despertarte con la mente más despejada.
– Vigila la posición de tus brazos. La costumbre de tener uno bajo la almohada termina provocando una sobrecarga poco aconsejable en tu hombro y en tu cuello. Lo mejor es colocar una mano sobre la almohada y la otra sobre la cadera.
– Favorece la salud mental. Ayuda al sistema glinfático, encargado de limpiar los tóxicos que afectan al sistema nervioso, a actuar mejor. Así, es posible evitar, o retrasar, la aparición de trastornos y dolencias del cerebro.
Has de tener en cuenta que dormir es una actividad que, precisamente por ser llevada a cabo a diario, parece no ser importante, pero lo es y mucho. La desconexión cerebral, la reorganización de todas las funciones del cuerpo y la depuración del organismo son solo algunas de sus funciones.
Igualmente, al dormir se liberan aminoácidos que queman la grasa corporal. Por lo tanto, dormir bien adelgaza, es saludable e imprescindible para poder afrontar tu rutina diaria con acierto. Piensa que dormir mal un día nos puede pasar a todos, pero más de tres o cuatro, si no hay un motivo de fuerza mayor, es algo que debería analizar un profesional.
Así que ya lo sabes. Si tu churri duerme a la izquierda dile que se vaya preparando para tenerte hacia esa dirección durante toda la noche. Lo malo es que te dará la espalda, pero bueno, todo sea por dormir bien, por levantarse de la mejor manera posible y con el organismo lleno de energía. ¿No crees?
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