El responsable del hotel estaba muy enfadado por lo que le pidió que abonara la reserva de una manera un poco brusca, incluso amenazándole. El atrevido no le permitió que le hablara así, además era funcionario, por lo que se debía tener cuidado con él.
¿Cómo habrá acabado todo? ¡Compruébalo!
¡Escucha aquí la bromita!