Marta Sánchez y otros artistas mártires de la moda «ochentera»
Estamos todos de acuerdo en que los 80 es una década maravillosa en la historia musical de nuestro país. Muchos de nuestros cantantes favoritos a día de hoy se consagraron en esta época y a etapas como la Movida se les rinde culto a día de hoy. Marta Sánchez es una de ellas y sus primeros éxitos con Olé Olé lo certifican.
Sin embargo, en cuanto a moda se refiere, fueron unos años… peculiares. Los cardados, colores eléctricos y estampados estaban a la orden del día y la cantante de La que nunca se rinde no iba a ser menos. Podemos afirmar que Marta siempre ha ido un paso adelante en cuanto a tendencias se refiere.
marta sanchez in the Eigthies pic.twitter.com/2J3z7rP1IY
— WhatHappendToThe80s (@w_the80s) 20 de julio de 2018
De esta guisa se paseaba la ídola por los 80. Aunque ahora nos puede impactar, en aquella época era un estilo de lo más copiado. Esta cuenta de Twitter, dedicada a rememorar sucesos de la década, ha hecho una selección de fotos muy curiosa de la madrileña.
Y no fue la única que sucumbió. Miguel Bosé era un habitual de las hombreras y así lo demuestra en esta actuación de Amante Bandido en 1984. La torera de piel con hombreras podía ser lo más moderno en su año pero a día de hoy ha quedado como un borroso recuerdo del pasado.
En este directo de A quién le importa no sabemos para dónde mirar: si a Alaska con ese peinado imposible, a su banda con prendas de todos los colores o al público, imitando hasta el más pequeño gesto de la carismática cantante. Y es que la intérprete de Espectacular siempre ha sido de lo más transgresora.
Pero si hablamos de peinados, el rey sin duda era Luis Miguel. El pelo cardado no solo era cosa de mujeres y el mexicano lo luce como nadie en el videoclip de uno de sus mayores éxitos de la época: Ahora te puedes marchar. ¿Volverá algún día a ponerse de moda? Miedo nos da.
Los 80 era la década de los estampados imposibles, pero si encima incluían la mayor cantidad de colores imaginados, era un bombazo. Luz Casal lo sabía y se enfundó este vestido de lo más arriesgado para llevar en los tiempos que corren. Con una tela que recuerda a la piel de un leopardo, mezcló toda la gama cromática habida y por haber.
Aunque ha tenido ya un par de regresos a lo largo de los últimos años, la moda de los 80 no termina de cuajar entre las nuevas generaciones. ¿Nos rendiremos de nuevo algún día a este tipo de vestuarios? Solo el tiempo lo dirá.
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