Muchos poseen un gato, un perro, pájaros, aunque un peque en concreto tiene periquitos australianos, dado que los corrientes no le gustan, prefiere los suyos porque se parecen a un personaje de Star Wars.
Por otro lado, un atrevidín tiene un águila, aunque nos ha confesado que en realidad es de peluche, pero para él es como si fuera de verdad y la quiere mucho.