En el momento de la llamada se encontraba debajo del coche e Isidro Montalvo comenzó a llevar a cabo la operación para rescatar a este ave, incluso estuvo a punto de avisar a las fuerzas especiales porque no sabía de qué tipo de gallina se trataba.
Quizás ha exagerado un poco, aunque al final ha admitido que todo era una bromita muy fresquita.