Un técnico ha desactivado este lunes, finalmente, una alarma que llevaba sonando sin parar desde el pasado martes, día 16, en una vivienda deshabitada, según habían denunciado los vecinos.
Este hecho ha ocurrido en Barcelona y la policía ha tenido que hacerse cargo del asunto. Por suerte, se trataba de un reloj con alarma que habían dejado los inquilinos, los cuáles habían abandonado la vivienda.