Te carcajeas, pero un poso de amargura recorre tu estómago. Más aún cuando sabes que en España la esperanza de vida supera a la establecida en la mayoría de países. «¡Soplaré las cien velas más solo que la una!», lamentas. Sí, la tarta está de vicio y las redes sociales pervivirán para que presumas del momento. Eso sí, la triste realidad es que no tener a nadie con quien compartir ese pedazo de pastel supone una desdicha, ¿no es cierto?
Cuando te duelen las muelas, vas al dentista. Cuando te fracturas la muñeca, el médico te la enyesa ¡y listo! ¿Pero qué pasaría si te vieras obligado a hablar contigo mismo durante días? ¿Y si, superada una edad, te fracturas las costillas y nadie te hace una visita al hospital? ¿Qué pasa si ya no tienes ni familia ni amigos? ¿Qué pastilla cura la soledad? Esta pregunta se antoja de ciencia ficción, aunque el Reino Unido ya ha tomado cartas en el asunto.
¿Cómo? Ideando lo que ellos llaman el Ministerio de la Soledad, una invención que en primera instancia puede parecer propia de un número típico de humor inglés. Pero no. El tema es serio. De hecho, en la tierra de los cielos grises y las cabinas de teléfonos rojas ya se ha convertido en un problema de Estado. Conocemos tus ansias por descubrir más detalles, pero no podemos diseccionar el proyecto, puesto que se encuentra en pañales.
Lo que sí es cierto es que la creación de este gabinete servirá para buscar remedio al aislamiento, un problema más grave de lo que parece. De hecho, los entendidos aseguran que sentirse solo equivale a fumarse unos quince cigarros al día. Es decir, estamos hablando de un agravio que no solo afecta al corazón, sentimentalmente hablando, sino que hace mella en nuestra salud.
En nuestro país, alrededor de un millón de personas en edad de jubilación vive en la más absoluta soledad. A este dato estremecedor se une el hecho de que los hospitales están llenos de personas mayores a los que nadie regala flores ni bombones.
Después de conocer estos datos, tú mismo puedes responderte a esta pregunta, ¿no crees? Y vamos más allá: ¿la soledad es solo un problema de los países desarrollados? Si la respuesta es sí, quizá nuestro problema está relacionado con nuestras vanidades o nuestro ajetreado ritmo de vida. Así que, por favor, para un poquito.
Por otro lado, los expertos relacionan esta desgracia contemporánea con la muerte prematura. Hay estudios que corroboran que sentirse solo afecta al sueño y nos conduce a las pesadillas. Además, puede agravar enfermedades como la diabetes, la artritis y, por supuesto, la depresión.
Uno de los remedios para combatir este declive es la música. Aunque, sí, pese al poder terapéutico de las canciones de tu artista preferido, no hay nada como un abrazo, ¿verdad?
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