Como diría tu abuelo «se acabó el carbón». Has pasado unas navidades de escándalo, no te has perdido ni una sola fiesta. La resaca de Nochebuena se fundió con la de Nochevieja y todavía no te habías recuperado del todo cuando llegó la del día de Reyes. Y ahora, de regalo, llega la cuesta de enero. ¿Qué puedes hacer para llegar con algo más de 5 euros en la cartera al fin de semana de carnaval?
Entre las ideas más prácticas para evitar que te veas tocando la guitarra en el metro se encuentran las siguientes:
– Ordenar tus gastos. De perdidos al río, pero lo importante es que lo que ingreses en enero evites gastártelo en las rebajas y estar el día 8 del citado mes a base de bocatas de mortadela. Sería idóneo que usaras alguna de las aplicaciones para tu teléfono móvil que te ayudará a conocer cuáles serán tus gastos y cuánto dinero te queda para terminar el mes de forma adecuada.
– Adiós a los caprichos. Evita los gastos que no sean estrictamente necesarios. Lo sabemos, ese abrigo que costaba 100 euros ahora vale 10 y te llama cada vez que pasas por delante del escaparate. Recuerda que en España el abrigo se usa apenas 2 meses. Ponte el del año pasado y podrás comer caliente un par de días más.
– La tarjeta de crédito bajo llave. Lo sabemos, tu hermano pequeño te pedirá que uses la tarjeta que lo paga todo, pero no caigas en la tentación. Paga en efectivo. Y si no tienes dinero, no compres nada, ¡hombre ya!
– Compara los precios y compra solo lo indispensable. Sí, tu abuela va a por los yogures al supermercado X y a por la leche al Y, pero lleva razón. A veces, andando un par de calles más, o en tu caso comparando precios en Internet, podrás adquirir lo que necesitas al mejor precio.
– Aléjate de tus amigos. Di que te vas de Erasmus y que volverás en primavera o en verano. Sí, son muy simpáticos, pero también te invitarán a que te compres aquello que deseas, a salir, a entrar, a comer y a lamentar tanto gasto innecesario.
Esta forma de superar la cuesta de enero puede parecer extraña, pero no lo es tanto. Cuando te pregunten tus familiares qué quieres por Navidad o por Reyes, pide bonos de regalo. Esto te servirá para comprar en rebajas, para no gastar más dinero y para ir renovando tu vestuario poco a poco antes de que llegue la tan ansiada primavera.
– Adiós a los restaurantes. Come en casa y hazlo de forma tradicional. Olvídate de los congelados, de los refrescos y de platos poco saludables. Aprovéchate del frío y apuesta por los cocidos de legumbres, la carne a la plancha y las ensaladas. Ahorrarás y ganarás en salud.
– La casa de tus amigos, o la tuya, como lugar de ocio. ¿Qué es más barato? ¿Coger el metro, ir a un centro comercial, pagar una entrada de cine, comer y regresar o quedarte en casa jugando a los videojuegos con tus mejores amigos?
Esperamos haberte ayudado a conocer unos trucos que te ayudarán a hacer de tu cuesta de enero una pequeña rampa que podrás recorrer con facilidad. Todo sea porque el 1 de febrero llegue a tu calendario y puedas comenzar a recuperar tu vida social de forma progresiva. Seguro que consigues empezar el año ahorrando, mejorar el rumbo de tu economía y afrontar fiestas, viajes y actividades varias con mayor soltura económica.
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