Los colores no dejan de acompañarnos a diario para darnos otro punto de vista de la vida. Desde el más feo a tu favorito, hay un amplio abanico en el que quizá ignores cuál es el más antiguo y por qué te vas a enamorar de él en cuanto lo veas.
Hasta hace poco tiempo se pensaba que en el arcoíris se incluían la mayor parte de los colores existentes. Tras descubrirse que ni el marrón, ni el gris aparecen en él, se comenzó a dudar de la creencia anterior.
Lo que parecía estar tan claro no lo estaba y por más unicornios que naveguen sobre arcoíris llenos de estrellitas, algo falla. Tanto que, cuando los investigadores han encontrado un yacimiento con los pigmentos más antiguos del planeta, el resultado ha sido una gran sorpresa para muchos.
¡El rosa brillante! El hallazgo ha sido posible tras un estudio de unos restos fósiles encontrados en el desierto del Sáhara, en Mauritania. Una serie de bacterias fósiles preservadas en una roca albergaban un resto de clorofila de mil cien millones de años de antigüedad, quinientos años más antiguo que el que se conocía hasta la fecha.
Este descubrimiento permite afirmar que estas bacterias eran incluso anteriores a las algas y que, probablemente, dominaran el mar. Curiosamente, la clorofila encontrada en estas bacterias, que se caracteriza por su color verde, cambia de color tras años de fosilización por lo que el resultado es una mezcla entre el púrpura y el rojo oscuro. Al limpiar un poco los restos, el resultado fue un rosa brillante espectacular.
Es más, los organismos que habitaban los océanos eran de este color e incluso teñían los mares con un tono rosa pálido. ¿Te imaginas poder ir a una playa y bañarte en un mar de color rosa chicle? ¡Sería un sueño hecho realidad para los amantes de este color!
Así que ya lo sabes, lo que te contaron en el colegio cuando te embadurnabas con las témperas de turno era mentira. El rosa no es la mezcla del rojo y del blanco, es el color más antiguo del planeta.
Por lo tanto, quizá haya llegado el momento de que le hagas un sincero homenaje a este color. Saca de tu armario todo lo que tengas en rosa y ve haciendo distintas combinaciones. A buen seguro, no tardarás en encontrar la que más te agrade para sorprender al personal.
Bromas aparte, la importancia de las cianobacterias en la evolución de los mares es un campo abonado para entender cómo el planeta se ha ido amoldando a las distintas circunstancias por las que ha pasado. Este tipo de estudios sigue sorprendiéndonos y aclarándonos una serie de cuestiones de vital importancia para entender cuál es el futuro de la esfera azul en la que la vivimos.
Quizá, ahora que sabes que el rosa brillante tiene tanta solera, le des una oportunidad en tu armario. El sindicato de cianobacterias te lo agradecerá eternamente. Todo sea por colaborar un poco con estos pequeños organismos que terminaron convirtiéndose en algas y que le dieron la forma, y la función, definitiva a los océanos que nos rodean. De ti depende ser algo más consciente de lo que supone cuidar el medioambiente y de qué tipo de planeta quieres dejarles a tus herederos. Nunca es demasiado tarde para empezar a apostar algo más por la ecología.
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