Cenas ligeras para perder peso

Redacción Cadena Dial

«De buenas cenas están las sepulturas llenas» dice el refrán y es totalmente cierto. El cenar a la española -tarde, de forma copiosa y con grandes cantidades de alcohol- no solo empeora tu salud sino también influye en que vayas engordando progresivamente. De hecho, si controlas tu cena podrás adelgazar. ¿Quieres saber cómo hacerlo olvidándote de las perjudiciales dietas de moda?

Propuestas de cenas saludables

Todas ellas han de ser ligeras y en ningún momento debería hacer presencia alguna la grasa saturada, los fritos o alimentos de complicada digestión. Te proponemos las siguientes:

 

Verduras y pescado. De las primeras solo debes recordar que deben estar cocidas o ligeramente pasadas por la plancha. Si prefieres la clásica ensalada no hay problema. Dentro del pescado escoge aquel que se pueda hacer fácilmente, que tenga una buena cantidad de Omega 3 (como el salmón) y aléjate de las latas de conservas que aumentarán tu ácido úrico.

Leche con miel y frutos secos. La miel aporta glucosa natural de alta calidad que ayudará a recuperar tu musculatura fácilmente. Los frutos secos también añaden Omega 3, ayudan al tránsito intestinal y contribuyen a reponer la energía perdida durante la jornada.

Pollo e infusión. El pollo es la carne más adecuada para evitar engordar. A la plancha y con especias puede ser una carne más que sabrosa. No temas a la hora de añadirle pimienta o chile si te gusta el picante. Para completar se recomienda una infusión relajante que te ayude a dormir.

Variado de verduras hervidas o a la plancha. A este plato le puedes añadir lo que quieras. Toda la verdura es siempre bienvenida por lo que deberás ir probando la combinación que más te guste.

Arroz hervido. Puede usarse como guarnición de los platos anteriores o bien tomarlo solo. No le añadas la clásica salsa de tomate de bote ya que lleva una cantidad de azúcar tremenda que no te ayudará, precisamente, a adelgazar.

Sopa. Evita las que vienen preparadas ya que contienen un alto nivel de conservantes e ingredientes químicos poco saludables. Apuesta por comprar verdura y por hacer tú mismo la sopa que más te agrade. Combinando verduras como las zanahorias, la lechuga, los puerros y el apio convertirás tu preparación en un caldo depurativo y lleno de propiedades.

Proporciones aconsejadas en cada plato

Los «expertos», dícese de tu vecina la del quinto que no se pierde un programa de Arguiñano, te dirán que la proteína y los hidratos mejor por la mañana. El del sexto dice todo lo contrario y ya no sabes qué hacer. Estas son las proporciones aconsejadas:

El pescado, el marisco, el calamar, la sepia y alimentos con poca grasa hay que cocinarlos siempre a la plancha, cocidos, al horno o hervidos. Pueden ocupar un 33% de tu plato.

– Si prefieres la carne recuerda que ha de ser siempre blanca (pollo, ave) y prepárala de la misma manera. Ocuparía el mismo porcentaje en tu plato.

– Los hidratos de carbono estarán presentes en la guarnición. Ensalada, menestra, puré de verduras, vegetales ya hervidos o cocinados (pimientos o espárragos). Pueden ocupar un 66 % del plato. Si escoges pan, pasta, patatas, maíz, guisantes o remolacha, solo el 33 %.

Ingredientes y proporciones, la clave del éxito

Los resultados de estas cenas son fantásticos y te permitirán perder peso fácilmente. Es posible que prefieras el clásico bocadillo con un poco de todo, pero cuando llegue la primavera te darás cuenta de que estas propuestas, que no han de ser aburridas, te han convertido en un Brad Pitt o en una Kate Upton casi sin darte cuenta. Ya sabes, para presumir hay que sufrir.