La música es mágica y puede hacernos sentir de mil maneras. Existen canciones para bailar, para gritar, para emocionarse o para llorar desconsolado. Hay música para todos los momentos de nuestra vida y artistas para todos los gustos y colores.
Con la cara llena de lágrimas terminó Leire Martínez, vocalista de La Oreja de Van Gogh, al asistir a un concierto de Rozalén en Bilbao. Y es que si sus canciones están cargadas de mensajes muy necesarios, disfrutarla en directo es una experiencia que no se puede expresar con palabras. Aunque Leire lo ha intentado.
«Acabé con la cara marcada de lágrimas, pero con el corazón lleno de sonrisas», confiesa la cantante vasca. Y es que es esa la sensación que se le queda a uno cuando asiste a un concierto de la de Albacete, lleno de verdad, emoción y sentimiento.
Pero si algo nos llena de emoción es comprobar que entre nuestros artista ese sentimiento por la música es compartido y se emocionan entre ellos. De estas amistades nacen temas compartidos que luego nosotros recibimos con mucha ilusión.
«Si me queréis, irse a verlos», pide Leire a través de la publicación en su cuenta de Instagram, además de aprovechar para dedicarle a Rozalén sus mejores deseos en su futuro en la música.
Una lleva una década cogiendo el relevo de Amaia Montero como vocalista de La Oreja de Van Gogh y otra despunta con su tercer álbum de estudio, Cuando el río suena… La unión de ambas en una canción ¡ha sido la esperanza de todos sus seguidores!
Ambas embarcadas en las giras de sus últimos discos, Rozalén se mueve por los escenarios de España como pez en el agua y Leire presenta junto a la banda su Planeta Imaginario en Argentina.
Que nunca nos falten estos conciertos y la música de dos de las grandes artistas de nuestro país.
