Vive más, comiendo un 20% menos
No es una deducción que alguien se haya sacado de la manga, es cosa de la ciencia. Pues según los últimos estudios comer un 20% menos y en un horario de 8 de la mañana a 5 de la tarde, puede mejorar considerablemente la salud de los individuos.
La investigación que ha dado lugar a estos resultados, se ha desarrollado sobre una raza particular de monos, Macaco Rhesus, la especie más parecida a nosotros, y es muy relevante porque esta raza comparte con el ser humano el 93% del genoma.
Además, esta raza tiene el mismo tipo de envejecimiento que nosotros -cambio del color del pelo, pérdida de músculo…-, una esperanza de vida de décadas y además los problemas que se detectan en los años de envejecimientos son iguales que en nosotros… diabetes, cáncer, osteoporosis, etc.
Teniendo en cuenta estas características, Rozalyn Anderson, colaboradora del proyecto, asegura que reducir las calorías retrasa el envejecimiento, y acaba haciendo que nuestro cuerpo se vuelva mucho más resistente.
Pero hay que tener en cuenta que este experimento dio estos resultados en simios de edad media, unos 40 años más o menos.
Entonces, teniendo en cuenta esto, lo que se recomienda es que se cene mucho antes y haya una reformulación de la dieta… es decir, cenar aproximadamente como muy tarde a las 5 de la tarde, ya que esto ayuda a reducir diferentes enfermedades y permite que cuidemos nuestro sistema digestivo.
Al hacer esto en los monos Rhesus, los científicos notaron que la longevidad de éstos se alargaba dos años más, lo que equivaldría a 6 años en humanos… ¡una locura!
La reformulación de la dieta, consiste en reducir la cantidad de calorías consumidas un 20%, ya que podríamos evitar considerablemente el riesgo de sufrir diabetes y enfermedades cardiovasculares, lo que permitiría alargar nuestros años de vida.