¿Qué podemos hacer si nuestro peque pasa de hijo ejemplar a rebelde sin causa?

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¿Cómo actuarías si tu hijo ejemplar cambia su actitud radicalmente y empieza a comportarse de forma furiosa en casa? ¿Es normal este comportamiento en los niños?

Davinia es madre de un niño de 8 años que nunca ha dado ningún tipo de problema: es educado, obediente y atento con sus compañeros. Tiene una hermana de tres añitos con la que ha estado totalmente involucrado desde el embarazo, así que no ha desarrollado celos. El problema es que, de repente, se ha vuelto un despistado y ha cambiado su actitud completamente: se pelea con su hermana, olvida hacer los deberes y cuando se le llama la atención se pone aún más furioso.

“Ha llegado incluso a darse cachetes a sí mismo. Nos dice que le da igual que lo castiguemos, que lo hacemos porque no lo queremos. Esta actitud solo la desarrolla en casa, en el colegio se comporta perfectamente. ¿Qué podemos hacer?”, pregunta Davinia a Rocío Ramos-Paul, nuestra Supernnany.

Supernanny aconseja sobre el cambio de actitud de nuestros hijos:

Si solo lo hace en casa y no lo hace en el colegio, es estupendo. Esto significa que el niño sabe controlarse. Ahora hay que averiguar por qué en casa no lo hace.

Este suceso pasa desde hace pocos meses, él dice que lo odiáis y que no lo queréis. Este mensaje, que es muy normal en niños, tiene que ver mucho con las llamadas de atención. Hay que tomárselo como quien oye llover.

Podría decirle “hijo, ya estamos con la historia de todos los días”, dejando claro que como padres no nos afecta. Cuando esté tranquilo podemos reforzar su comportamiento diciéndole lo bien que hace las cosas y lo mucho que lo queremos.

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Puede ser que, aunque su hermana no le haya molestado y no haya sentido celos hasta el momento, ahora con tres años sea más graciosa y pueda desarrollarlos.

También puede ser que el niño con ocho años esté pasando por algo que le revolucione y le haya llevado a desarrollar un comportamiento que no tenía hasta ahora.

Creo que es muy importante que los padres intenten que no todo sean castigos. Es normal que si no están acostumbrados a que su hijo se comporte así, se centren en lo negativo y en penalizarlo para intentar que la conducta cambie. Lo que no saben muchos padres es que ésta cambia mucho mejor si reforzamos aquello que hacen bien, obviando lo su mal comportamiento.

¡Escucha aquí los consejos de Supernanny! (15.06.2017) Y cada semana, no te los pierdas en Atrévete.

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