Ya deberías haber empezado con la operación bikini para lucir cuerpazo en verano, lo que no vale es machacarte a última hora porque puede ser perjudicial para tu salud y contraproducente para tus objetivos. Pero no pasa nada, aún estás a tiempo.
A continuación, te damos unos sencillos consejos que tú también puedes poner en práctica y que son más útiles de lo que crees:
1. Encuentra tu deporte.
Las matrículas para gimnasios se quintuplican en estos meses. Es la moda, lo que hace casi todo el mundo. Muchos de los que van ni si quiera lo disfrutan, cosa que juega en tu contra. Lo principal para llevar a cabo esta «operación» es estar satisfecho y a gusto con lo que haces.
Por ello, no te estanques en la única posibilidad de ir al gimnasio o salir a correr y… ¡Encuentra el deporte que más se ajusta a ti! Natación, baile… hay muchas opciones.
Es fundamental y todos lo sabemos, pero parece que se olvida más de la cuenta. A veces se cometen muchos errores cuando se hace dieta. Ni tienes que pasar hambre, ni dejar de comer ciertos alimentos, simplemente mantener una dieta equilibrada.
El coco, por ejemplo, tiene numerosos beneficios para la salud y lo puedes añadir a infinidad de recetas. Tampoco te olvides de las verduras y frutas, base imprescindible de nuestra alimentación.
3. Cuídate por dentro… y por fuera.
Teniendo una piel cuidada notarás antes los beneficios del ejercicio en tu cuerpo. Y si además te gusta entrenar al aire libre, debes tener en cuenta los efectos de la contaminación y el sol… ¡Protege tu piel!
4. Se constante, pero no olvides descansar.
El descanso es fundamental para el bienestar del organismo. En el ejercicio, además, es casi tan importante la actividad física como la recuperación. Los músculos necesitan recuperarse bien tanto con la alimentación como con el descanso. Debes ser constante si quieres conseguir resultados… ¡Pero no te obsesiones!
5. ¡Olvídate de los sacrificios!
Aunque solamente de vez en cuando y para desconectar de la monotonía. Con tal de no caer en la rutina y el aburrimiento, ocasionalmente puedes saltarte la dieta y darte un atracón. Pero no lo hagas más veces de la cuenta y sé constante con el trabajo.