Un estudio realizado en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard encontró que las personas optimistas tienen 50% menos riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, sin importar factores como la edad, el peso o el tabaquismo.
No tener un estado de ánimo negativo no significa que tengas uno optimista. Sentirte satisfecho con la vida y experimentar un bienestar psicológico puede llevarte algún tiempo y no siempre ser permanente, pero si pones de tu parte se puede lograr. Te dejo algunos tips para ello:
–Disfruta los placeres sencillos. No tienes que ir a un restaurante de lujo para disfrutar una buena comida. Aprende a gozar con lo que tienes a mano, aunque sea lo cotidiano. El enfoque con el que lo veas puede cambiarlo todo.
–Busca un hobbie o pasatiempo. Busca algo que te apasione y dedícale parte de tu tiempo libre. Los hobbies te provocan satisfacción y contribuyen a tu felicidad.
–Critica menos. No inviertas tu energía en señalar lo que hacen mal otros o tú mismo. Revisa cuáles son los motivos que te llevan a querer criticar y trabaja con ellos.
–Comunícate asertivamente. Explica tus necesidades de forma clara y recibe las de las otras personas de la misma manera. No temas preguntar si algo no te queda claro e intenta que tus mensajes sean precisos y específicos.
–Ríe más. La risa provoca la producción de endorfinas, sustancias de la química cerebral relacionadas con el bienestar.