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El árbol que se convirtió en un jardín, por Alejandro Sanz

Nuria Serena

El cantante visitaba hace una semana el proyecto que puso en marcha hace un año para niños con cáncer en la azotea del Hospital 12 de Octubre, convertida ahora en un jardín para niños con cáncer

Alejandro Sanz asegura que cuando se es padre de un hijo se es padre de todos los hijos del mundo.  Rodeado de niños visita el nuevo jardín. Cae el sol de pleno, son las cuatro de la tarde y él se disculpa: “Perdonen la hora pero era el único tiempo libre que tenía”

Y es que, a pesar de estar con las grabaciones de La Voz y preparando su gira Sirope que comienza el 30 de julio en Córdoba, el compositor quiso hacer un hueco en su apretada agenda para visitar el proyecto que busca mejorar la estancia de los pequeños en el centro.

Un proyecto puesto en marcha por la fundación Juegaterapia, encargada de crear estos espacios verdes. “Los niños necesitan más que la medicina, es importante que tengan sitios para jugar”, resalta el cantante.

La instalación que ha costado unos 250.000 euros, tiene de 800 metros cuadrados, columpios, plantas, motos de juguete y tiene también una cúpula que proporciona sombra para que los niños puedan jugar mientras reciben su terapia. “Se nota la diferencia en los pequeños cuando pueden entretenerse y reír”, comenta el artista, que es padre de cuatro hijos. Aunque él está involucrado en otros proyectos solidarios (como la lucha por salvar el Ártico), confiesa que cuando se trata de ayudar a niños “siempre está dispuesto”.

Alejandro y su hija mayor Manuela han diseñado también uno de los pañuelos que usa Baby Pelón, un muñeco sin pelo inspirado en los niños que padecen cáncer. “Mis hijos siempre están involucrados en los proyectos que apoyo” apunta.