Podemos variar el cromatismo de nuestros ojos y aclararlo para lucir una mirada diferente.
La técnica utiliza el láser, que consigue rebajar el color de nuestros ojos de forma permanente, sin cirugía ni efectos secundarios demostrados hasta el momento.
Tan sólo son necesarias cinco sesiones para eliminar la capa superficial de melanina y lograr aclarar de manera natural el iris. El precio, unos 2000 euros de media en cualquiera de las clínicas que realizan el tratamiento.
Lo cierto es que, en un principio, la técnica se creó con el propósito de corregir la heterocromía (personas que tienen un ojo de cada color ) y que no podía corregirse hasta ahora de forma permanente. Aunque el fin estético de este tratamiento ha acabado por superar las razones primigenias.