Estamos en pleno siglo XXI

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Estamos en pleno siglo XXI, y las cosas han cambiado mucho en el terreno del amor. La inestabilidad define a las relaciones de pareja porque ya no se mantiene un compromiso a cualquier precio. Ni se tiene por qué aguantar todo, ni tampoco se debe tirar la toalla demasiado rápido, aún a sabiendas de que la sorpresa sea un punto de no retorno.

Conocemos casos en los que las parejas deciden separarse después de toda una vida de convivencia…Y aunque ya no nos extrañe, no deja de ser contradictorio que el tiempo atestigüe un tipo de convivencia fraudulenta para el que ni cultural ni socialmente estamos preparados. Y de eso se trata de aprender a conocer al otro en ese proceso selectivo, emocional primero y de la convivencia después.

De esta forma y sin posicionar la época o moda en el calendario que nos toque vivir, cualquiera puede ser dueño de su destino emocional, siempre que éste se muestre positivo, a la vez que cómplice y productivo en la pareja. El que entendemos aquí y el mismo que siempre defenderemos en QFELV.